Alfredo Morales y la FPF: Daño colateral
Alfredo Morales fue convocado por Jürgen Klinsmann para la selección de Estados Unidos, y probablemente juegue ante Perú, otro de los seleccionados a los que pudo defender. ¿Llegó la hora de que la FPF implante un programa de búsqueda y reclutamiento de jugadores para que casos como el de Morales no se vuelvan a repetir?
La globalización, la evolución de la tecnología y las migraciones han hecho de que el fútbol cambie. Cada día vemos a más jugadores formarse integra o parcialmente en el extranjero. En el Perú se han dado los casos de Paolo Guerrero, Carlos Zambrano y Renato Tapia, quienes terminaron de formarse en el exterior, y el de Cristian Benavente, quien fue reclutado por la Federación para que defienda a selección peruana.
El caso de Benavente es paradójico porque la Federación no fue quien descubrió al jugador, pero a pesar de eso logró reclutarlo con éxito, algo que no pasó con Alfredo Morales, mediocampista por izquierda que optó por defender la camiseta de Estados Unidos, rival de Perú en el amistoso del viernes 4 de septiembre, que ha sido convocado una vez más por Jürgen Klinsmann y que podría enfrentar a una de las otras dos selecciones por la que es elegible.
De Seijas a Morales
Alfredo Morales es hijo de un peruano que migró a Alemania y que se estableció en Berlín, ciudad en la que nació Alfredo, motivo por el que cuenta con la nacionalidad de aquel país y también con la peruana. Además, Morales cuenta con la nacionalidad estadounidense gracias a su padre, quien sirvió a la armada de ese país.
El tema Alfredo Morales es espinoso porque Sergio Markarián tuvo comunicación con el jugador. Fue el padre del futbolista el que respondió de manera negativa al interés del entonces entrenador de la selección peruana, y fue porque este interés de Markarián recién se dio en 2011. En cambio, la US Soccer ya tenía conocimiento sobre Morales desde el año 2007, cuando destacó en el Mundial escolar y lo reclutó porque fue quien mostró primero su interés, además de ofrecerle un mejor clima deportivo y una mayor posibilidad de jugar una Copa del Mundo.
Lo anecdótico del caso es que Alfredo Morales aún se encuentra habilitado para cambiar de asociación a Perú o a Alemania, porque el reglamento FIFA en su artículo 8 señala que para quedar inhabilitado un jugador que ya posee la nacionalidad de otro país debe haber disputado como mínimo dos partidos oficiales con la selección absoluta, y Morales sólo ha disputado uno durante la Copa de Oro 2015.
Al margen de este tema, porque resulta muy complicado que Morales deje de ser tomado en cuenta por Klinsmann y opte por defender a Perú, este caso ya se repitió años antes con Luis Manuel Seijas, volante de padre peruano que decidió defender a Venezuela, su país de nacimiento, y se puede repetir ahora con Jean-Pierre Rhyner, defensor del Grasshopper suizo que ha sido convocado por la Sub-20 de Suiza.
¿La hora de reclutar?
El ejemplo de Cristian Benavente es el que mejor grafica lo que hoy se hace en distintos lugares del mundo: la búsqueda de jugadores con dos o hasta tres nacionalidades que puedan incrementar el universo de futbolistas convocables en cada selección. Un ejemplo emblemático a nivel mundial es el de Miroslav Klose, jugador que nació en Polonia, que se siente polaco, pero que jugó por Alemania y que se convirtió en el máximo anotador en la historia de los Mundiales.
En el caso de la selección peruana, el trabajo que se hace en ese sentido es bastante pobre. A Benavente se le logró reclutar por un tema fortuito, pero con el correr de los años el número de jugadores que se nos escapen puede incrementarse. A los mencionados Luis Manuel Seijas y Alfredo Morales en unos años se pueden sumar los Jean-Pierre Rhyner (Suiza), Collin Fernández (Estados Unidos), Pablo Peláez (Estados Unidos), Pierre da Silva (Estados Unidos) y Henry Mashburn (Honduras o Estados Unidos).
La FPF debe entender que este trabajo de reclutamiento es vital para incrementar el universo de jugadores convocables. Lógicamente no todo futbolista que juega en el extranjero necesariamente debe ser convocado –eso lo determinará el entrenador de turno-, pero lamentablemente en el Perú eso no puede saberse porque en la mayoría de casos existe un total desconocimiento, y eso es lo más grave del caso: que no se les toma en cuenta por omisión, y no por cuestiones futbolísticas.
El caso Rhyner
Tras rechazar dos convocatorias para la selección Sub-18 de Suiza, el defensor central Jean-Pierre Rhyner volvió a ser llamado por el combinado helvético, aunque esta vez fue para la Sub-20. En este caso, a diferencia de otros, sí hubo oportunidad de que Rhyner viniera al Perú para ponerse a órdenes de Víctor Rivera. Incluso llegó a disputar un par de amistosos de preparación para el Sudamericano de la categoría que se desarrolló en Uruguay.
El profesor Rivera decidió no llevarlo al Sudamericano por cuestiones netamente futbolísticas, pero eso ocurrió cuando Rhyner formaba parte de la Sub-18 del Grasshopper suizo. Hoy el jugador se encuentra en el primer equipo y ya ha debutado en la Schweizer Pokal. ¿Alguien al interior de la FPF se preocupó por seguir su evolución entre la Sub-18, el equipo ‘B’ y el plantel principal?
Rhyner volvió a ser convocado por Suiza y existe una gran posibilidad de que esta vez sí acepte el llamado. Lamentablemente el jugador nunca recibió una señal de parte de la Federación, y esa señal no necesariamente era una convocatoria a la selección absoluta. Parte del trabajo que debe desarrollar la FPF es la del seguimiento a los jugadores, el de preocuparse por ellos, de llamarlos, de comunicarse de manera constante con todos los que se considera dentro de un universo convocable tanto para mayores como para las selecciones juveniles.
Precisamente lo citado líneas arriba es lo que hizo Ricardo Gareca al visitar a Cristian Benavente y a Alexander Callens a pesar de que no iba a convocarlos, y es lo que hizo también cuando llamó a Alexi Gómez. A los tres jugadores les dio su respaldo y les explicó que dependía de ellos formar parte de las convocatorias.
El problema es que no hay quien haga ese trabaja con los futbolistas que vienen más abajo. En ese sentido el proyecto que será encabezado por Daniel Ahmed es una luz en el fondo del túnel para intentar colocarnos a la par de otras selecciones que hacen el trabajo de búsqueda y reclutamiento.
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Fotos: AFP, Andina, prensa Grasshopper CZ, EFE
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