Colombia - Chile: Agárrense de las manos
Colombia y Chile empataron 3-3 en el Metropolitano de Barranquilla, sellando los de Pekerman su clasificación a Brasil 2014. Fue un real partidazo en el que los locales se vieron 0-3 abajo y lucharon para lograr la paridad.
El capo: No perdió el paso
Pese al desorden y desconcierto colombiano, James Rodríguez no se perdió en la desesperación cafetera y pudo desestancar el medio colombiano. De una jugada que peleó hasta el final llegó el primer tanto de Teófilo Gutiérrez. Además, una acción individual suya culminó en el penal que Falcao García convirtió en el 2-3 momentáneo.
La clave: Se la quiso llevar fácil
Chile no fue avasallante, mas sí asfixiante en el mediocampo. Colombia se encontró ante un equipo sumamente incómodo y con velocidad para trasladar el balón hacia el ataque. Con un Alexis Sánchez inspirado y Arturo Vidal comandando con garbo la volante chilena, el equipo de Sampaoli encontró tres goles en la primera media hora de juego producto de la picardía y velocidad de sus atacantes. No obstante, Chile se fue sintiéndose ganador al entretiempo, sin esperar a una Colombia dominante para la segunda mitad. Los ingresos de Fredy Guarín y Macnelly Torres le dieron el dominio a Colombia que tardó en aprovecharlo, pues recién a los 70’, Teófilo Gutiérrez pudo anotar el descuento. Con ese envión anímico y un estadio que despertó, parecía cuestión de tiempo para que el once cafetero consiguiese los goles que lo llevaron al 3-3 final.
La joyita: Calma donde se necesita
A los 30’, Alexis Sánchez ganó de cabeza con una palomita en el área de Colombia y fusiló a Ospina, quien con muy buenos reflejos rechazó el esférico que, sin embargo, llegó a la cabeza del central Marco Gonzales, quien pese a contar con un defensor colombiano encima, tuvo la serenidad e inteligencia de asistir a Sánchez quien nuevamente se encontraba solo para definir. En esta ocasión, el delantero de Barcelona no falló y marcó el tercero.
La calamidad: Silba bajo
A los 69’, luego de la expulsión de Carlos Carmona, Jorge Sampaoli mandó al campo a Francisco Silva por Eduardo Vargas para no perder consistencia defensiva. Sin embargo, el volante de Osasuno no pudo entrar en el ritmo que exigía el partido y Chile con un hombre menos.
Los cambiazos: Cambio de juego
Néstor Pekerman apresurado por el 3-0 rápido en contra, tuvo que hacer un replanteo total y arriesgar en la segunda parte. Antes del pitazo inicial de la etapa complementaria, el técnico argentino mandó al campo a Fredy Guarín y Macnelly Torres por Abel Aguilar y Stefan Medina. Cambios ofensivos y con jugadores que, finalmente, le dieron posesión y precisión al desesperado ataque colombiano.
La cancha: De sur a norte
Una numerosa barra chilena llegó al Metropolitano de Barranquilla haciendo un contraste impresionante. Entre las decenas de miles de camisetas amarillas, todo el grupo de hinchas chilenos fue acomodado en un solo sector (situación que no ocurrió cuando Perú jugó en Barranquilla). Por ello, los aficionados sureños se hicieron sentir en buena parte del partido con cánticos frente al silencio del decepcionado hincha colombiano ante la goleada chilena.
El blooper: Lo que pudo ser no será
Apenas empezado el primer tiempo, un pase preciso de James Rodríguez encontró a Teófilo Gutiérrez pisando el área sin marca por la zona del segundo palo de Claudio Bravo. Sin embargo, ‘Teo’ mandó el balón por encima del travesaño.
Kazuki Ito: No perdió el control
Por cómo se dieron los 90’, pudo ser muy complicada la labor del brasileño Paulo Oliveira, quien cumplió una regular labor, pues dejó pasar algunas faltas que merecieron amarilla; no obstante, el trámite no fue violento. El mayor error de Oliveira fue caer en la exageración de James Rodríguez quien simuló una falta en la segunda mitad, tras un forcejeo con Francisco Silva.
Fotos: AFP, Photosport
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Chile llega con madurez al mundial y tiene un buen entrenador y Colombia buscara ser la sorpresa merecida clasificación de ambos.