Mal sabor de boca
Se inició la participación de los equipos peruanos en la Copa Sudamericana, que arrojó un discreto saldo de un triunfo en cuatro partidos. Si vamos directamente a la propuesta, el saldo es aún más preocupante.
La Copa Sudamericana parece la plataforma perfecta para que el hincha en esta parte del continente se preocupe a mitad de año. Nuevamente el resultado, en suma, de los cuatros representantes fue lamentable. Más allá del triunfo de Universitario, queda claro que la alerta pasa por lo mostrado en general.
Unas de cal y otras de arena
Universitario mejoró notablemente en el aspecto ofensivo, pero no pudo hacerlo en el tema defensivo. El ingreso de Henry Giménez y de Maximiliano Giusti le dio un mayor orden y mucho más peso a la hora de generar ataques. El uruguayo se complementó bien con Edison Flores y aprovechó bastante la banda izquierda para crear jugadas de peligro. A lo último hay que sumarle que anotó un golazo de cabeza en la victoria 3-1.
Pero si la ‘U’ generó peligro y fue superior al Deportivo Anzoátegui, el problema se dio en el segundo tiempo. Por una cuestión natural, los venezolanos reaccionaron y fueron a buscar el gol del descuento que les permitiera afrontar con tranquilidad el partido de vuelta, y ahí fue donde Universitario lució vulnerable. El DANZ sólo pudo anotar una vez, pero tranquilamente pudo hacerlo en dos ocasiones.
Reyno en llamas
Melgar fue un desastre total en Barranquilla. El cuadro arequipeño salió al campo completamente desorientado y fue apabullado por un Junior que en la previa lucía como superior, pero que no se esperaba que endosara un contundente 5-0 a su par peruano. A diferencia de otras oportunidades, la defensa fue el punto más flaco en el equipo dirigido por Juan Reynoso. Nunca hubo coordinación entre la línea de cuatro, el arquero y los dos medios centrales que colocó.
Los jugadores de Junior ganaron la espalda de manera constante y explotaron al máximo la desorientación defensiva de Melgar. En el segundo tiempo, Reynoso intento replantear con el ingreso de Rainer Torres y de Hernán Hinostroza para darle mayor desdoble a su equipo, pero la apuesta estuvo lejos de funcionar. Apenas pudo neutralizar momentáneamente al cuadro colombiano, que volvió a pegar a los 89 minutos. El resultado parece liquidar la serie, y el juego mostrado por ambos equipos lo sustenta.
Diferencias notables
Era quizás el partido en el que menos se esperaba del equipo peruano en cuestión, y la realidad no fue muy distinta. León recibió a Emelec en el estadio Heraclio Tapia, y sucumbió por un inapelable 1-3. Los dirigidos por Carlos Ramacciotti no lograron mostrar una propuesta sólida. Manco y Sotil nunca pudieron juntarse para generar peligro, mientras que Takeuchi estuvo abandonado en el ataque.
Emelec, como buen equipo con jerarquía, aprovechó al máximo la pasividad del local y endosó tres goles como para demostrar su poderío. León no logró cohesionar su propuesta y nunca definió si quería entrar por abajó, si quería explotar las bandas o si debía buscar el juego aéreo. El cuadro huanuqueño fue un total desorden en el campo, y un cuadro con tanta potencia no perdona esos errores.
Renuncia voluntaria
Unión Comercio fue otro de los que cayó, esta vez por 2-0 en su visita a las Águilas Doradas. El cuadro colombiano fue el que dominó las acciones, pero se mostró como el menos potente de los equipos cafeteros que juegan en esta Copa Sudamericana. El conjunto donde juega el peruano Johan Fano se mostró como un equipo de transiciones lentas. El problema fue que Comercio no aprovechó esta lentitud para intentar explotar la rapidez de jugadores como Alexander Sánchez.
El cuadro oriundo de Nueva Cajamarca se dedicó a esperar metido en su arco, rezando para que Ronald Ruiz, quien igual fue figura, sacara todo. Salir a defender no está mal si vas a apostar por contragolpes rápidos que te permitan lograr tu objetivo como visitante. El tema es que Comercio renunció completamente al ataque. Defendió sólo para llevarse un empate 0-0, y cuando eso pasa es bastante probable que tarde o temprano llegue el gol del equipo que domina. El encuentro fue muy parecido al Boca Juniors 1-0 Cienciano de la Copa Libertadores 2007, donde los cusqueños sólo defendieron y esperaron un 0-0 que se vio interrumpido por un golazo de Hugo Ibarra en el minuto 91+.
Por cuestión del score, Unión Comercio tiene posibilidades de darle vuelta al marcador de ida; si nos centramos sólo en el juego, el cuadro dirigido por Walter Aristizábal no tiene ninguna posibilidad de clasificar. En Medellín no mostró nada más allá de que tiene un buen arquero, y con eso definitivamente no le va a alcanzar. De arranque deberá mostrar una cara mucho más agresiva si quiere prevalecer.
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Fotos: Luis Chacón y Mihay Rojas / DeChalaca.com, diario El Mundo y El Heraldo de Colombia
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