Minuto 12: Isidoro lindo y querido
En Chile 1962, México acabó con 32 años de frustraciones mundialistas al ganar por primera vez en la Copa del Mundo. Fue ante el posterior subcampeón, Checoslovaquia, en un partido cuya historia comenzó a cambiar gracias a Isidoro Díaz.
México ha sido habitual participante en los Mundiales desde el inicio, en 1930, y hoy es una selección con una identidad de juego definida, que se hace respetar en cualquier competición y contra la que nadie puede ser considerado claro favorito.
Pero la historia no fue fácil para que los aztecas lleguen a este punto. Tuvieron que pasar 32 años, equivalentes a 12 derrotas y un empate, para que pudieran saborear su tan ansiada primera victoria en un Mundial. Ocurrió en Chile 1962 y la víctima fue de lujo: Checoslovaquia, que se iba a consagrar como la futura subcampeona de esa Copa del Mundo. En un partido que comenzó cuesta arriba, casi como sugiriendo que una derrota más sería inevitable, y cuya historia comenzó a cambiar gracias a un decisivo gol de Isidoro Díaz.
Minuto 12
El 7 de junio de 1962, ante 10,648 almas, en el estadio Sausalito de Viña del Mar, los mexicanos comenzaron como hasta ese momento ocurría siempre: perdiendo. Muy rápidamente, a los 23 segundos del primer tiempo, los checos dejarían fría la defensa tapatía con un gol de Vaclav Masek en el pórtico del mítico Antonio Carbajal.
Pero vendría la inesperada respuesta de los aztecas. A los 12', una gran jugada comenzada desde el área contraria terminaría en pases efectivos entre Héctor Fernández y Alfredo del Águila en el área chica de los checos, hasta que el último pase de Fernández terminaría en la definición fuerte con zurda de Isidoro Díaz, libre ante el arquero Viliam Schrojf.
Y los goles aztecas no quedarían ahí. Alfredo del Águila convertiría el segundo para el cuadro mexicano y sobre el término del encuentro, Héctor Fernández marcaría vía penal. En ese partido los checoslovacos jugaron mal, pero más adelante avanzaron hasta ser subcampeones del mundo, tras perder la final contra Brasil.
Algunos quisieron descreditar el triunfo de la escuadra mexicana, al expresar de que el conjunto checo jugó a media caña al estar ya clasificado a la siguiente ronda. Pero esa tarde ‘El Chololo’ Díaz, quien jugaba como volante extremo, comenzó a cambiar la historia. Su trayectoria cuenta que jugó como titular inamovible de las Chivas de Guadalajara entre 1955 y 1968. También vistió las sedas del Oro de Jalisco, Tigres de Monterrey y León AC. Y con su selección nacional tendría otros dos mundiales: Inglaterra 1966 y México 1970, cuando ya era el hombre que había permitido que todo un pueblo confiara en México.
Foto: revista Gol y Gol
Mostrar/Ocultar comentarios
