Composición fotográfica: Kenny Romero / DeChalaca.comEn la Copa América de 2007, Giancarlo Maldonado le sacó una pequeña sonrisa a un pueblo venezolano golpeado por la crisis sociopolítica que se vivía en aquel entonces. Así, ante Bolivia, marcó el primer gol llanero en el certamen en que fueron anfitriones.

 

A lo largo de la historia de los campeonatos sudamericanos, Venezuela nunca había sido sede hasta que llegó el 2007. Dicho año, los venezolanos pudieron ser, por primera vez, anfitriones de la Copa América y, por tal motivo, el objetivo que se tenía era hacer uno de los mejores papeles en la historia del fútbol de ese país. De esta manera, se hizo caso omiso a la crisis sociopolítica que se vivía y llegaron las doce delegaciones -las diez pertenecientes a la Conmebol, además de México y EEUU- que fueron invitados, para disputar la XLII edición de la Copa América.

Perú ya había despachado en el partido inaugural 3-0 a Uruguay en Mérida y en San Cristóbal se aguardaba el debut de la vinotinto ante Bolivia. El partido estuvo pactado para las 20:50 horas y aproximadamente dos horas antes del inicio, el estadio Polideportivo de Puerto Nuevo se veía totalmente repleto; fueron 42 mil almas las que estuvieron presentes aquel 26 de junio. Richard Páez, a quien hoy se le atribuye el progreso del fútbol venezolano, estaba al mando del combinado vinotinto y mandó al ruedo a su hijo Ricardo pero, además, ubicó a Giancarlo Maldonado como la esperanza de gol; el hijo de Carlos Maldonado, otrora atacante uruguayo nacionalizado venezolano, vaya que no defraudó.

Minuto 21

 

Eran exactamente las 20:48 horas y Mauricio Reinoso, réferi ecuatoriano, se disponía a levantar los pulgares para empezar el primer encuentro de los anfitriones. Con todo en orden, hizo sonar el pitazo inicial para que todo el coloso estalle de algarabía, incluido Hugo Chávez, Evo Morales y el mismo Diego Maradona. En un principio se esperaba que los locales pasen por encima a la escuadra del altiplano, sin embargo los de Erwin ‘Platiní’ Sánchez salieron decididos a ganar el encuentro.

La agresividad del los bolivianos fue disminuyendo de a pocos y la posesión del balón pasó a ser netamente venezolana. Fue de esta manera que, a los 21', llegó el primero de la vinotinto vía Giancarlo Maldonado, quien tras un potente zurdazo cruzado venció a Galarza y pudo marcar su primer gol oficial con casaquilla de Venezuela en este certamen. Los llaneros ganaban, pero la falta de movilidad de Juan Arango preocupaba por demás al DT llanero.

El flojo nivel que venía mostrando Bolivia dio hincapié para pensar en la goleada venezolana, algo que no fue así. A punta de puro coraje, los bolivianos volvieron a tomar las riendas y empataron el partido a los 38’ a través de Jaime Moreno, quien volvía a integrar la selección luego de cinco años. Para la segunda mitad, los locales usaron todos sus recursos para liquidar un partido que, sobre el papel, era fácil. Arango estuvo en otra nota durante todo el partido, así que los ataques venezolanos eran por medio de Vitali, Páez y Maldonado. Fue así como llegó el segundo gol de los anfitriones, tras un sutil remate de Ricardo Páez a los 55’. A pesar del triunfo parcial de Venezuela, los bolivianos seguían mostrándose incisivos en ataque y llegó el empate a los 84’ por obra de Arce, quien, minutos después, tuvo el tercero en sus pies.

El resultado final fue un 2-2 que dejó un sabor agridulce por saberse ganadores por el buen nivel, pero perderlo a poco del final en una desconcentración. Aquella vez, el jugador que generaba más expectativa de su selección, Juan Arango, estuvo ampliamente perdido. Sin embargo, hubo quienes se ganaron los aplausos del público caso Páez y, principalmente, Giancarlo Maldonado quien buscó el gol del triunfo durante todo el partido. Además, el actual delantero del Atlante de México, se convirtió en el máximo anotador de Venezuela con 20 tantos. Toda una nación espera ver una actuación igual o mejor de su delantero estrella en Argentina, quien sigue dejando en lo más alto al apellido, tal como lo hizo su padre defendiendo a la selección llanera en los ochenta.

Composición fotográfica: Kenny Romero / DeChalaca.com

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