Con algunos apuros, Uruguay dio cuenta de Ecuador por 2-1 y fortaleció su camino para llegar a Rusia 2018. El tricolor norteño, pese a estar cerca del empate ante el elenco celeste, no fue eficaz de cara al gol y continúa cediendo posiciones.
    Kenny Romero | @kenny_romero
    Director Periodístico

Lo que se apreció en el estadio Centenario, en una jornada 11 de las Eliminatorias en la que cuatro partidos se disputaron prácticamente en simultáneo, fue una repetición de la historia que Uruguay suele demostrar cada vez que actúa como local: se consolida como amplio dominador, pero la contundencia se la reserva solo para algunas ocasiones. Claro: su rival, Ecuador, pese a sus bajas, acudió decidido a dar una estocada. No lo logró, pero dejó un buen semblante en el balance global.

La inquietud que se instaló en la noche de Montevideo fue cuán bien sustituido estaría Edinson Cavani, quien se perdió este partido por acumulación de amarillas. En esta ocasión, Diego Rolán, su sustituto, cumplió su tarea a carta cabal y, desde luego, regaló una alegría al borde del epílogo de la primera fracción.

Es obvio que la historia se tiene que contar paso a paso, por lo que es menester señalar que Uruguay, en efecto, mandó en su cancha y no tardó mucho en encontrar el camino al gol. Es decir, el que la consigue la consiguió. Y fue así como llegó la apertura del marcador vía Sebastián Coates, tras una salida de un tiro de esquina que desacomodó la marca ecuatoriana. Aquella mínima ventaja, como podía ser esperable, le otorgó una inclinación ofensiva al once charrúa, pero a partir de ella se notó algo de estrategia defensiva en Ecuador. Lo cierto es que a Uruguay, post gol, le costó una barbaridad acechar con comodidad, más si estaba rodeada por un bloque posterior que supo controlar cualquiera de sus embestidas -incluidas las de Luis Suárez, quien ofreció una actuación para el olvido-.

Sobre el final del primer tiempo, Diego Rolán anotó de penal. (Foto: Referi.uy) 

Y ese trajín, sin darse cuenta, fue el que empezó a agigantar la presencia de un Ecuador hambriento por convertir. Logró su cometido a partir de una proyección de Renato Ibarra que acabó en el oportunismo de Felipe Caicedo, quien dio la impresión de silenciar a un escenario que de ninguna manera presupuso tal paridad. Y por esa razón es que, como suele ocurrir en sus partidos como local, los de Oscar Washington Tabárez sacaron a relucir su estirpe. Esa garra que fue más charrúa que nunca y que empujó para que  Rolán, en el estribo del primer tiempo, decretara un penal que estaba oleado y sacramentado.

Pese a que en la segunda etapa el rival (Ecuador) tomó posesión de las acciones, siempre sufrió para penetrar y dejó la impresión de no ser capaz de propinar el mazazo en Montevideo. Y ello le bastó a la celeste para preservar el 2-1 y con ello decir, a todo pulmón y sin Cavani, que el camino a Rusia 2018 está a escasos partidos de concretarse.

Los goles

Fotos: Reuters, Referi.uy


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La Ficha del Uruguay 2 - Ecuador 0

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