Sergio 'Jeringa' Guzmán: Con o sin Jeringa
Son escasos los jugadores que compartieron el color celeste de Sporting Cristal y el verde de Atlético Nacional, ambos equipos rivales en la Copa Libertadores. Uno de ellos fue Sergio Guzmán, defensa colombiano que pasó por el fútbol peruano en la temporada 2000.
La carrera de Juan Sergio Guzmán Zapata (Medellín, 26 de febrero de 1970) comenzó en el municipio de Bello, una zona popular y complicada al norte de la ciudad en la que nació. Su primer club fue el Atlético Nacional, donde formó parte de sus categorías juveniles, aunque no fue con el cuadro verdolaga con el que debutó en el fútbol profesional.
Corte de diamante
En 1991, cuando ya se lo conocía como ‘Jeringa’ -apodo que recibió por su sentido del humor, tal como el de un cómico en su país-, apareció jugando en la recién creada Segunda División colombiana, torneo que disputó en las filas del Envigado y con el que logró el ascenso.
La siguiente temporada -ya en la máxima categoría-, Sergio Guzmán tuvo su primer contacto con el fútbol peruano, pues se unió al equipo Julio César Uribe para jugar durante el primer semestre. Con el equipo naranja permaneció hasta 1997, aunque con un breve paso por Independiente Medellín un año antes.
Una vez culminado su primer ciclo en Envigado, se volvió a enrolar al DIM durante dos campañas antes de cambiar de aires, pues en el año 2000 se mudó a Bogotá para enrolarse al Independiente Santa Fe. Fue jugando para los ’Cardenales’ que a mediados del campeonato colombiano le llegó una oferta de Perú, concretamente del Sporting Cristal, equipo que necesitaba reforzar su defensa ante la marcha de Miguel Rebosio al Zaragoza de España.
Destapado a medias
Quien le dio buenas referencias sobre Cristal fue Luis Moreno Murillo, volante colombiano que esa misma temporada apenas si jugó en el Rímac durante el Torneo Apertura, y quien tras dejar a los celestes regresó a su país para jugar precisamente por el Santa Fe. Animado también por la oportunidad de jugar la Copa Merconorte, Guzmán partió rumbó a Lima y quedó bajo las órdenes de Juan Carlos Oblitas, el técnico durante esa temporada.
El debut de ‘Jeringa’ en el campeonato peruano fue en la fecha 1 del Clausura, cuando Cristal empató como local 1-1 ante Alianza Atlético. En el cuadro rimense se acomodó dentro de una defensa con tres jugadores, línea en la que peleó por un puesto junto a Santiago Salazar, Frank Rojas e Ismael Alvarado. Así, se mantuvo como titular hasta la fecha 9, jornada en la que enfrentó a Cienciano en el Cusco y donde recibió su única expulsión.
Tras descansar por dos encuentros, el central colombiano se mantuvo como titular durante el resto del torneo, sumando un total de 20 partidos, aunque a su equipo no le alcanzó la campaña para superar a Universitario que ese año ganó el título nacional. Sin mayor suerte también en la Copa Merconorte, en la que los del Rímac apenas si ganaron dos partidos, la última presencia de Guzmán en el Perú fue en un choque extra ante Sport Boys que definió al subcampeón y que ganaron 2-1.
Con doble examen
De regreso en Colombia fue contratado por Atlético Nacional, el equipo de su juventud y con el que al fin pudo debutar, logrando disputar en su segunda temporada dos finales. En la primera, por el Torneo Apertura colombiano, el cuadro verdolaga se enfrentó a América de Cali, cayendo derrotados en los partidos de ida y vuelta.
Aquel subcampeonato, sin embargo, les permitió clasificar a la entonces nueva Copa Sudamericana, la que se disputó durante el segundo semestre y en cuya primera edición disputaron la final con San Lorenzo de Argentina. Si bien Sergio Guzmán no actuó en el partido de ida cuando su equipo cayó goleado por 0-4, sí lo hizo en la vuelta en el Nuevo Gasómetro, aunque el empate sin goles que sacaron de nada les sirvió.
Tras esa experiencia volvió al Independiente Medellín en 2003, y luego durante dos años al Envigado antes de jugar una temporada en Deportes Quindío y otra más en Once Caldas. Así, para 2008 tuvo su segunda experiencia internacional, la que lo llevó hacia Panamá, donde el club Árabe Unido lo contrató para jugar ese año. Al final, solo se quedó durante el Torneo Apertura, regresando a Colombia en el segundo semestre cuando fue contratado por el Itagüí.
Desquite en la banca
Con las ‘Águilas Doradas’, Guzmán volvió a jugar en la Segunda División y tardó dos años en cumplir el objetivo del ascenso. El título llegó de la mano de Álvaro de Jesús Gómez -el extécnico de Unión Minas y FBC Melgar-, quien los guió en una campaña que se cerró tras superar en la final al Deportivo Pasto.
Con el cuadro de Antioquía, ‘Jeringa’ se mantuvo hasta la fecha de su retiro a mediados de 2011, cuando optó por colgar los botines al ver que no contaba con muchas más opciones de jugar. De inmediato comenzó a cumplir labores de técnico al mando de dos categorías juveniles de Itagüí. Ya en 2012, y con el arribo de Leonel Álvarez para dirigir el primer equipo, es ascendido a su comando técnico, puesto que mantiene un año después cuando es contratado por Deportivo Cali.
Recién en 2015 es que da el salto definitivo, pues es contratado por Árabe Unido -su ex equipo- para que los dirija esa temporada, la misma que culminó en éxito pues ganó los dos torneos del año. Ambos títulos significaron un quiebre en su carrera, pues fueron los primeros que ganó en Primera División, algo que no logró ni en sus veinte años como futbolista en los campeonatos de Colombia, Panamá y Perú.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: Facebook, elcolombiano.com, torneopostobon.com; Recorte: diario El Comercio
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