Convicciones chalaqueras
Comienza un nuevo ciclo eliminatorio y en DeChalaca reafirmamos nuestras convicciones sobre la selección, sus técnicos y los procesos.
En DeChalaca somos fieles a nuestras convicciones y a lo que esperamos de nuestra selección y de nosotros mismos. Somos conscientes de que no somos los dueños de la verdad, pero creemos férreamente en las ideas que profesamos y que esas ideas se perfilan en la búsqueda de un resultado común con lo que nuestros lectores, público que entendemos especialmente selecto, también buscan; a lo que la generalidad de lectores, hinchas y futbolistas de alguna manera buscan. Cada quien a su manera. Algunos más pasivos que otros; algunos más críticos que otros.
Por todo eso, en DeChalaca queremos reafirmar nuestras convicciones y nuestros métodos a puertas de una nueva Eliminatoria. Porque creemos que hoy, más que nunca, es importante tener las metas claramente definidas, y el camino para llegar a ellas, delineado.
Sobre el técnico
NO SE TRATA DEL NOMBRE. Si es Sergio, Ricardo o Paulo. O Josep. Se trata de respetar y colaborar con el trabajo. Claro que influye cuál es el nombre en ese momento. Es más fácil y es mejor creer que la persona al mando está capacitada para hacer su labor. Pero no lo es todo. Son muchos los nombres y más los estilos. No todos gustan, pero son el fiel reflejo de lo que el encargado cree que puede hacer con lo que tiene.
NO SE TRATA DE FANATISMOS. A Markarián lo respetamos porque es un hombre de convicciones. También creímos que era un buen técnico que tenía un camino difícil y pocos recursos. Lo apoyamos no porque fuéramos sus hinchas, sino porque siempre quisimos lo mejor para la selección y eso jamás será pedir que condenen a alguien a la guillotina en la Plaza de Armas.
SE TRATA DE RESPETO. En DeChalaca no creemos, a rajatabla, en la capacidad de pedir que le quiten el trabajo a las personas. Respetamos y avalamos en general a quien sea designado para un cargo, en este caso puntual porque al hacerlo sentimos también respetar y avalar a la selección. Eso, por supuesto, no exonera de críticas a la persona designada; pero siempre dentro de los límites del respeto, siempre de manera alturada. Siempre constructivamente. Hoy toca hacer lo propio con Gareca.
SE TRATA DE SER REALISTAS. En DeChalaca creemos que con Gareca se ha dado un paso adelante. Creemos que esta selección tiene una idea aún más cuajada de lo que busca y de cómo pretende hacerlo. Creemos que se está haciendo un trabajo serio que continúa sobre algunas de las bases que dejó el proceso anterior. Pero tampoco somos románticos ni incautos. No creemos que las cosas cambian de la noche a la mañana. No creemos que somos mejores de lo que éramos hace unos meses con Pablo Bengoechea. No creemos, y en esto somos absolutamente sinceros, que Rusia nos verá jugar.
SE TRATA DE QUERER MEJORAR. Creemos, sí, que en este nuevo proceso hay un trabajo conjunto que se desarrolla con seriedad e inteligencia. Por eso, porque creemos que con trabajo se puede mejorar, porque creemos que a pesar de no creer que estaremos en el próximo Mundial, se puede creer en que cosas grandes se pueden lograr y que, quién sabe, algo bueno sacaremos de todo esto; por la fuerza de nuestras convicciones nos decidimos a apoyar a los que tienen las mismas intenciones y las mismas ideas que nosotros. Nos resolvemos a colaborar con que el fútbol cambie; con que mejore. Porque creemos que Gareca es pieza importante de un proceso largo -complementado por la creación de una unidad técnica de menores- que tendrá también a otros que nos conducirán a nuestro norte, confiamos y apoyamos al técnico y a su trabajo.
Sobre el proceso
SE TRATA, UNA VEZ MÁS, DE IDEAS. Quienes no pueden ver otra cosa que intereses en cada cosa que se afirma -porque así se comportan y el ladrón cree que todos son de su condición- suelen tildar de viudas a quienes creen genuinamente en alguien. Viudas de Autuori. De Markarián. Luego de Bengoechea. Fuimos criticados por defender el proceso que lideró don Sergio y que luego continuó Bengoechea. Lo que defendimos no fue a uno ni a otro. Defendimos nuestras ideas, nuestras convicciones sobre cómo se deben manejar las cosas, cómo llevar los procesos. Defendimos lo que creímos fielmente era la mejor forma de asegurar el desarrollo de la selección.
SE TRATA DE PENSAR MÁS EN EL MAÑANA QUE EN HOY. Creemos que el trabajo largo, tendido y planificado da frutos en contraposición al trabajo cortoplacista, al intento efectista, al mal llamado trabajo que se demuestra improvisado. Trabajo. Proceso. Sinónimos no tan sinónimos pero criterios fundamentales para lograr nuestras metas. Por eso creemos en la continuidad. Por eso hemos pedido hasta el cansancio que existan tranquilidad y espacio para trabajar; que los contratos sean por más de una eliminatoria.
SE TRATA DE SER PACIENTES. Para tener progreso se necesita proceso, y para tener un proceso se necesita paciencia. Por eso apoyamos en su momento la contratación, aunque corta, manoseada y mal llevada, de Bengoechea: por haber sido la primera vez que se advertían sospechas de mantener un proyecto que ya había sentado bases. Bases que hoy, en parte, son cimiento de lo que plantea Gareca, quien, esperamos, tenga la tranquilidad para trabajar largo y sin interrupciones. Ante todo, paciencia.
Las convicciones y el camino
APOYAR NO SIGNIFICA APAÑAR. Nuestras ideas son propias y no las condicionamos. En DeChalaca no entendemos nuestra labor periodística si ella no aterrriza en acciones concretas que busquen procurar la mejora del fútbol peruano. Creemos que ese es el camino para lograr nuestras metas.
No por lo anterior dejaremos de decir las cosas como son, de llamarlas por su propio nombre; sin miedo, sin asco. No dejaremos de criticar lo que haya que criticar. No dejaremos de poner la pierna fuerte cuando tengamos que hacerlo. Pero sí ayudaremos. Colaboraremos con el trabajo. Criticaremos para avanzar, no para retroceder. Dejaremos constancia de las cosas para informar y sumar más al grupo, no para vender más noticias. Jamás para ganar más clics. Nunca para poner nuestro nombre en boca de todos antes que a la selección.
Trabajaremos en DeChalaca, como siempre, como equipo. Trabajaremos como sabemos hacerlo y acogeremos a quienes, como nosotros, crean en los mismos ideales y quieran sumarse a esta nueva lucha de cuatro años. La lucha de todos. La lucha de las ideas. Ideas que apoyan a la selección. (LOS EDITORES)
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Fotos: AFP
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Adelante y a meter más pierna fuerte para mejorar la organización de nuestro fútbol y el trabajo en menores, sólo asà cambiaremos el discurso, sea del medio del cual fuere, de cada 4 años.
