Aurich - Melgar: ¡Qué leche!
El partido fue…
FRICCIONADO. Los golpes y jugadas duras entre jugadores, no dejaron que la redonda pueda recorrer con normalidad. Sin abusar del juego fuerte en la mayoría de acciones, pero sí con bastantes pausas por las constantes faltas (sumado a eso el campo sintético, que hizo que más de un jugador terminara golpeado) se desarrolló el encuentro en el Elías Aguirre que, durante 90’, aparte de las emociones por tiros cercanos a los arcos, solo se oyó los lamentos chiclayanos y celebraciones arequipeñas tras el autogol de Perleche a los 48’.
El compacto
Las fotos
Crónica ---> http://goo.gl/PH88h4Fotos: diario La Industria de Chiclayo
Posted by DeChalaca.com on Miércoles, 1 de abril de 2015
El capo: Jonathan Medina
Las oportunidades que está teniendo, las aprovecha al máximo. El portero dejó su arco invicto con buenas intervenciones y, como suele decirse, también con la fortuna y suerte extra que debe tener todo arquero. El arequipeño de la categoría 93 se viene afianzando en el puesto. ¿Reynoso lo mantendrá o no en el arco cuando el ‘Canguro’ Ferreyra se recupere?
La pizarra
Mosquera tuvo un cuadro bastante parchado, puesto que por sus internacionales (Gallese, Ramos, Vílchez y Céspedes con Perú y Tejada con Panamá) y lesionados (Cuba y Valoyes) contaron con hasta 7 jugadores menos. Goyoneche bajo los tres maderos y Marcos Delgado como líbero, aunque sustituido por Gianmarco Gambetta por lesión. Por los movimientos de sus atacantes, se puede presumir que fungieron Pacheco y Ross de extremos, para dejar a Rengifo de centro delantero. Con los cambios y movimientos de algunos de sus jugadores, Aurich terminó jugando con un 4-2-3-1, con Balbuena de lateral izquierdo, Diego Pizarro de lanzador detrás del nueve, y Álvaro Medrano fungiendo de volante por los lados, intercalando bandas con Pacheco. Por su parte, Melgar también jugó con tres al fondo, pero con una variante –a diferencia de Aurich- entre los ofensivos: utilizó un 3-4-2-1. Hubo un mayor trabajo de recuperación en el 'Dominó'.
Kazuki Ito: Luis Garay
Proliferaron las acciones friccionadas y se tornó injusto su accionar. La jugada puntual (del primer tiempo) es la que ocurrió a los 24’, cuando en una dividida, Édgar Balbuena estiró la pierna, que luego derivó a un alto en la humanidad de Ascues, quien venía corriendo tras el balón: el paraguayo le estampó la suela de la zapatilla en el pecho al volante rojinegro. Amarilla y nada más. Sí, aunque usted no lo crea. En la segunda mitad, a los 82’, cuando una jugada ya había sido cortada por falta de Yordi Vílchez sobre Montaño, el zaguero Sub-20 decidió propinarle una patada compartida entre el cuerpo del colombiano y el balón. Desde aquí, le recomendamos de buena fe al zaguero que el juego fuerte no es precisamente la de un matón y que las poses equivocadas no se deben imitar. También, se coincide ante la jugada de Balbuena, que Garay debió expulsar al jugador del ‘Ciclón’.
Foto: diario La Industria de Chiclayo
Video: CMD
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