Aurich - Alianza: Lo que el sintético se llevó
En el desgastado césped sintético del Elías Aguirre, Aurich y Alianza igualaron 0-0 en un partido aburrido, que recién sobre el final despertó ciertas emociones. Lo mejor del partido: el trabajo de Víctor Soroa, el segundo árbitro asistente.
El partido fue…
ABURRIDO. El partido empezó con un buen trabajo de recuperación por parte de ambos equipos. Luego de muchas fricciones en el mediocampo, Aurich comenzó a dominar tibiamente la posesión y fue quien más lo busco. Incluso le anularon un gol a Ramos a los 21’ por fuera de juego. Sin embargo, luego de esta jugada, ambos fueron incapaces de poder superar la línea defensiva del otro. Para el segundo tiempo, esto se repitió y el resultado fueron varios bostezos para asistentes y televidentes. Aunque cabe resaltar que a los 68’ hubo otro gol anulado, esta vez a Guevgeozián. La propuesta ofensiva de Sanguinetti, sobre todo el ingreso de Cedrón, ayudó a que los últimos minutos sean vistosos, pese a que el marcador acabó sin goles. Por último, es importante señalar que el vetusto césped sintético del recinto chiclayano es un impedimento para que los veintidós jugadores puedan desplegar su talento.
Las Fotos
El Capo: Josimar Atoche
En un partido tan poco vistoso como el que protagonizaron chiclayanos y victorianos en el atardecer del sábado, el volante chalaco cumplió una silenciosa labor, pero efectiva en el mediocampo blanquiazul. Se encargó también de marcar a Junior Viza y Jorge Bazán, quienes carecieron de chances de gol a lo largo del encuentro.
La Pizarra
Mosquera alineó un agresivo 3-4-1-2 con el regreso de Junior Viza y Hernán Rengifo. Cummings, Balbuena y Ramos estuvieron en la línea defensiva. Adelante alinearon Estrada, Rojas, Viza y Céspedes. Bazán jugó como enlace detrás de Pacheco y Rengifo. Durante el primer tiempo, la táctica no dio los resultados esperados y Mosquera decidió el ingreso de Mariño al inicio del segundo tiempo, en lugar de Cummings. Con este cambio, el 'Burrito' pasó a ocupar el lugar de Estrada, quien bajó a ocupar el espacio dejado por el zaguero panameño. A los 63’, Noronha reemplazó a Pacheco e intercambió de posición con Rengifo, quien desde entonces pasó a ser el delantero por derecha, dejándole su lado al iquiteño. Pese a que Aurich dominó, el equipo de Mosquera careció de decisión y efectividad. El ingreso de Acevedo por Bazán fue un llamado a que el equipo se dedicara a ser más creativo. No obstante, el gol nunca llegó.
Por su parte, Sanguinetti mandó al campo su clásico 4-línea-2. Los hermanos Guizasola como laterales mientras que Ibáñez y Araujo fueron los centrales. En el mediocampo estuvieron Atoche, Míguez, Costa y Landauri. Cueva se situó a las espaldas de Guevgeozián, el único punta. El medio grone cumplía labores mixtas, pero a los 66’, Sanguinetti decidió sacar a Costa y colocar a Montes como segundo delantero. Con esta cambio, Alianza pasó a un 4-3-1-2 con un juego que, aparentemente, debieron haber aprovechado los laterales. El partido siguió sin mayores ocasiones de peligro, a excepción de los dos goles anulados correctamente a cada equipo. El ingreso de Cedrón, en lugar de Landauri a los 75’, fue un intento de Sanguinetti de comenzar a hacer verdadero daño por los costados. Fue gracias a esto que los últimos 10’ del partido fueron bastante animados, pese a que el marcador acabó como empezó. Para finalizar, Aparicio tuvo que ingresar a los 89’ debido a que Miguel Araujo sufrió un golpe en la sien tras chocar con Ramos.
Kazuki Ito: Michael Espinoza
Destacado arbitraje de uno de los llamados próximos referentes del arbitraje nacional. Pero quien resaltó fue su segundo juez de línea: Víctor Soroa. Él levantó el banderín en dos jugadas que terminaron en gol, la primera fue para Aurich y la segunda para Alianza. La segunda, sobre todo, era una jugada muy fina, pero Soroa se mostró acertado e hizo cumplir, junto a sus compañeros, el reglamento de forma correcta. Partido escaso de polémicas y sin mayores contratiempos.
Foto: diario La Industria de Chiclayo
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