After Party: Ser o parecer
César Vallejo estuvo cerca de conseguir su segunda victoria como visitante en la Copa Sudamericana, pero los errores de siempre hicieron que un equipo peruano volviera a resignar una victoria. A pesar de eso, los trujillanos dejaron un par de cosas para resaltar.
SÍNTOMAS DE ATAQUE. La Vallejo demostró en Sucre que tiene con qué hacer daño en las pocas ocasiones claras que genera. Ya lo había demostrado en Bogotá cuando se impuso a Millonarios, y lo volvió a demostrar en Sucre, en donde golpeó en las dos primeras claras con las que contó. Pando y Chávez han entrado en sintonía, y parecen entenderse bien con los mediocampistas alimentadores, en este caso Quinteros y Millán. Ahí también se podría considerar a Hinostroza, que aporta bastante con sus pases largos. El cuadro trujillano es efectivo, por más que el mismo Pando luego haya fallado una ocasión que podía haber significado el 1-3.
TIENEN CON QUÉ. A pesar de haber resignado una victoria que parecía hecha, Vallejo demostró que tiene un mejor plantel que el discreto y animoso Universitario de Sucre. Los bolivianos trataron de apelar a las tácticas que siempre aplican los equipos de altura, el pelotazo largo, el remate de afuera y los constantes centros al área, pero estos no funcionaron. Por el contrario, Vallejo mostró un mejor funcionamiento colectivo apoyándose en un hombre clave como John Hinostroza, quien movió los hilos del equipo dirigido por Franco Navarro. Los laterales también treparon, aunque en menor medida. Los delanteros mostraron eficacia de cara al gol. Lo más flojo quizás vino por el lado de Donald Millán y de Ronald Quinteros, quienes no mostraron su mejor cara en la altura de Sucre. Por todo lo demás, Vallejo deja la sensación de que en Trujillo no debería tener demasiados problemas; aunque con un equipo peruano nunca se sabe.
LA VIGENCIA DE SIEMPRE. No nos referimos a la plena vigencia de un John Hinostroza que mantiene intacta su calidad para poner pases en profundidad, sino a los errores defensivos que siempre nos cuestan un triunfo que parece en la bolsa. Vallejo repitió errores del pasado que ya parecían haber quedado escritos en el manual de las cosas que no debemos hacer cuando debemos defender un resultado. Los centrales lucieron endebles a la hora de la marca y del juego aéreo, y Navarro quiso solucionar esto al colocar a Muente adelante de ellos, pero en lugar de defenderse con la pelota, le cedió mayor terreno a un Universitario de Sucre que se convirtió en un vendaval y que finalmente consiguió el empate.
Fotos: diario Correo del Sur de Bolivia
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