Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com Ludogorets eliminó al Steaua Bucarest de la Champions por su defensa Cosmin Moti, quien atajó dos remates en la definición por penales. Algo siminar ocurrió en la Copa Perú 2013, cuando el zaguero Martín Cuadros del Saetas de Oro detuvo tres tiros en la tanda de los doce pasos.

 

Este miércoles se completaron los diez equipos clasificados a la fase de grupos de la Champions. De ellos, la llave más reñida se disputó en el Ludogorets Arena de Bulgaria: allí, el local Ludogorets Razgrad tenía que remontar la serie ante el Steaua Bucarest de Rumania, que había ganado por 1-0 en la ida. Al cabo de los 90', el dueño de casa estuvo a un tris de quedar al margen, sino fuera por el tanto del atacante Farias Wanderson, que sobre la hora emparejó la llave y, posteriormente, con suplementarios de por medio, forzó la tanda de penales. En esa vía, Ludorogrets ganó 6-5 y se instaló en la fase de grupos de la Champions.

No obstante, la gran anécdota del partido no podía pasar por alto: Ludogorets Razgrad se había quedado en inferioridad numérica a los 118', tras la expulsión de su arquero Vladislav Stoyanov. Esto, pues, derivó en que su relevo para los lanzamientos desde los doce pasos, de manera irremediable al haber efectuado los tres cambios, tenía que ser un jugador de campo. El responsable para cuadrarse bajo los tres palos fue el defensor Cosmin Monti, paradójicamente de nacionalidad rumana y que, increíblemente, se convirtió en héroe al contener los tiros de Cornel Râpă y Paul Pîrvulescu. Una historia que ya dio la vuelta al mundo por tamaña relevancia y por haber clasificado por primera vez a este equipo -con apenas 13 años de existencia- a la siguiente instancia del máximo torneo a nivel de clubes en Europa.

 

 

Sin embargo, tal antecedente no nos resulta ajeno en el Perú. El caso más reciente se produjo en la Copa Perú 2013. En octavos de final de la Etapa Nacional, Saetas de Oro de Arequipa enfrentó al Fuerza Minera de Puno, en el Luis A. Gutiérrez Toro de Putina (provincia en la que, de acuerdo con una investigación de DeChalaca, se ubica el estadio más alto del mundo) y, tras ganar 1-0 en la ida, sucumbió por el mismo score en la vuelta y forzó los lanzamientos de penales. En esa instancia, surgió un héroe: el defensa Martín Cuadros, quien -de emergencia- se había puesto los guantes de arquero tras la expulsión del meta Martín Derteano cuando su equipo -Saetas de Oro- ya había hecho todas las variantes.

Lo que vino en los disparos desde los doce pasos fue aún más emocionante de lo que ocurrió en Bulgaria: Martín Cuadros detuvo tres ejcuciones: las de José Elguera, Martín Dall'Orso Jr. y Diego Angles (ver video). Con ello, Saetas de Oro ganó 3-4 en la tanda y clasificó a cuartos de final, instancia en la que quedó eliminado a manos de San Simón, hoy en el Descentralizado. Está, pues, no ocurre todos los días, tal como la manera en que se generó la histórica clasificación del Ludogorets a la fase de grupos de la Champions.

Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
 

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