Se congeló el infierno
El estadio Ali Sami Yen estuvo más frío que nunca. La nevada originada en Estambul obligó a que se suspenda el encuentro entre Galatasaray y Juventus cuando iban jugados 32 minutos del primer tiempo, situación que recuerda otros casos de partidos detenidos.
El antecedente más cercano de un partido suspendido data del año 2012, cuando el 4 de diciembre, en Zagreb, Croacia, el Dinamo recibió al Dinamo Kiev y el partido se paralizó cuando iba 0-0. El juego se reanudó y finalmente culminó igualado 1-1 De la misma manera, se recuerda cuando se detuvo el partido entre Sporting Braga y Manchester United el 7 de noviembre del mismo año debido a un corte de luz. Los portugueses vencían por 1-0, pero al reanudarse el partido el United volteó 1-3. Otro caso curioso recuerda al Zenit de San Petersburgo recibiendo al APOEL Nicosia cuando, en el minuto 55, el árbitro ordenó detener el partido debido a la cantidad de humo vertido de las bengalas de los hinchas locales. A diferencia de lo que pasó en Estambul, en los casos expuestos los partidos se pudieron reanudar al cabo de un tiempo.
Otro caso muy recordado es el del encuentro entre Inter y Milan por la vuelta de los Cuartos de Final de la Champions en la temporada 2004-2005. El equipo rojinegro había vencido 2-0 en la ida y al cabo del minuto 73, iba adelante del marcador por un gol. En ese momento, una lluvia de bengalas por parte de los hinchas del Inter obligó al árbitro a declarar la suspensión definitiva del partido. Incluso, uno de aquellos proyectiles llegó a impactar en el entonces arquero del Milan, el brasileño Dida.
Foto: AFP
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