¿Qué será lo que quiere el 'Negro'?
Julio Zamora llegó al Callao, al frente de Melgar, para enfrentar al Sport Boys. El sistema que escogió disponer para su equipo fue un avezado 4-1-4-1 que en la práctica se convertía en un “4-1-5”. En él, Alva, Di Cosmo, Salas y Cuesta eran los media puntas de Meza Cuadra, quien se paraba como centro delantero, encargado de la conclusión de las jugadas, unos metros más adelante. Un planteamiento que resulta híper ofensivo en una rápida lectura, pero que debe ser observado con mayor detenimiento.
La primera conclusión luego de un análisis más o menos exhaustivo, es el que la propuesta no dio resultado dado que ninguno de los delanteros destacó, ni colectiva ni individualmente, y no generaron muchas situaciones de gol. Las hubo sí, pero no en la misma medida que podría esperarse por la cantidad de gente dispuesta en el ataque. Peor aún resultaría la calificación si es que se considera que el gol del fue marcado por un defensa quien a su vez había sido asistido por otro defensor. Pero, ¿realmente le salió mal la jugada al ‘Negro’ Zamora?
El ataque de Melgar es mucho más efectivo cuando juega de local. Resultaría ocioso describir porqué es que rinde más en casa que fuera de ella, pero se puede asegurar que sus atacantes no son fantásticos. Son buenos, sí, y hacen goles en Arequipa y en las demás canchas, pero no por ponerlos a todos juntos se asegura la eficacia ofensiva del Melgar. Lo que se asegura es mucha entrega y dinámica en la gente de arriba pues no hay ningún ocioso en esa mano de delanteros. Es seguro que eso lo sabe muy bien el técnico pues el hombre, de fútbol, sabe bastante. Los pone juntos porque así desgasta a la defensa rival para que los goles caigan más tarde que temprano. Eso no importa pues valen lo mismo en el minuto uno o en el noventa, como tampoco importa que lo hagan sus atacantes, da lo mismo que sea García quien se desprenda del fondo para anotar a poco del final.
Con esos cinco, Zamora asegura poca salida de la gente de atrás del Boys y deja poco alimentados a los delanteros rosados. Y tampoco era que Alva o Di Cosmo estuvieran prohibidos de hacer goles, obviamente; ellos, como cualquiera de los otros ofensivos pudieron hacerlo desde mucho antes. El ‘Negro’ dejó entonces la posibilidad de anotar y defendió muy bien desde el ataque generoso (en metros corridos y en cantidad de gente) de su equipo y, a la par, demolió la resistencia rosada que al final, cedió. Era una apuesta que pudo no salirle bien, pero sí se le dio y cuenta que lo haya hecho, mesuradamente, ante un rival que le permitía un riesgo como ese. Porque es cierto que su defensa estuvo flaca… en cuanto a cantidad de gente, al menos.
Fotos: José Salcedo / DeChalaca.com
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Como se malogro ese chico en Alianza...esa historia ya la vivimos varias veces
Esto ya se vio en otros partido, para mi Aubert deberÃa jugar desde el comienzo