Vientos de cambio
Ambos equipos llegaron a este fecha con dudas sobre la formación a presentar en el Mansiche ya que el rendimiento en sus últimos encuentros daba para pensar que podían haber cambios.
En la Vallejo el gran dilema estaba en su zona posterior donde la labor de sus centrales y la de su arquero le había costado puntos importantes al cuadro poeta. Por ello, no sorprendió que en esta ocasión Víctor Rivera le diera su confianza a Diego Morales, quien se estrenó con camiseta trujillana en el arco, y a Atilio Muente que disputó su primer encuentro oficial en el año luego de superar una lesión que contrajo en la pretemporada.
En Aurich el problema es al revés, ya que desde la venta de Luis Tejada la falta de gol se hizo muy notoria en cada partido para el ‘Ciclón’. Para jugar en Trujillo, Franco Navarro vio con buenos ojos a Osnar Noronha, jugador que en la semana venía pidiendo una oportunidad de alternar en el primer equipo ya que desde su regreso a Chiclayo tras dejar Gálvez apenas si tuvo minutos para jugar.
Con el resultado puesto, se puede decir que el ganador de esta doble apuesta fue el técnico de los chiclayanos, ya que Noronha acabó por darle la victoria a un Aurich que busca hacerse con el tercer puesto del campeonato, que precisamente ostenta la Vallejo, para así acceder a una nueva Copa Libertadores; además, se acerca a Real Garcilaso, equipo al que intenta darle caza para disputar el Play Off por el título nacional aunque dicha meta parezca lejana para algunos. Si bien estas variantes no aparentan ser soluciones definitivas para sus problemas, al menos parecen ser parches que les permitan seguir luchando por sus propósitos de aquí al final de la temporada.
Foto: diario La Industria de Trujillo
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