Fernando Ochoaizpur: Hachas y machotes
En semana de Eliminatorias, el recuerdo de uno de los pocos seleccionados bolivianos que militaron en nuestro país: Fernando Ochoaizpur, corajudo mediocampista que en 1997 jugó en Universitario.
A nivel futbolístico, los noventa no fueron la mejor época en el fútbol peruano, pero ello no era impedimento para que algunos foráneos que eran seleccionados en sus respectivos países recalaran en el torneo doméstico. De hecho, tras la restauración de los Descentralizados, vinieron a nuestro país tanto jugadores mundialistas que estaban en el ocaso de sus carreras -Letelier y Nunes en la ‘U’ o Pedro Monzón en Alianza-, además de otros que estaban en plena consolidación de ella, tal como fue el caso de Estanislao Struway en Cristal.
Pese al arribo de chilenos, paraguayos o argentinos mundialistas a la capital, ningún seleccionado boliviano militó aquí a pesar del último éxito que fue acudir al Mundial de Estados Unidos 1994 por méritos propios. Es más, llegó a la ‘U’ un par de centroamericanos que fueron titulares con su selección, como Eugenio Dolmo y César Obando, ambos hondureños y que jugaron las Eliminatorias rumbo a ese mundial.
Garra del Altiplano
No obstante, con las eliminatorias sudamericanas para Francia ya en marcha, en 1997 Universitario sorprendió al anunciar el fichaje del argentino naturalizado boliviano Fernando Néstor Ochoaizpur (nacido el 18 de marzo de 1971 en Junín), cuya característica principal era su temperamental juego, acorde con la identidad de la garra crema. Antes de eso, Ochoaizpur inició su trayectoria en 1990 en Estudiantes de La Plata, club en el que solo jugó 10 encuentros durante tres temporadas.
Fue en suelo altiplánico donde Ochoaizpur rindió sus mejores actuaciones, primero con San José y luego con Bolívar -si bien alternó media temporada en Oriente Petrolero-, para salir campeón con ambos equipos (1995 y 1996) e incluso marcando goles. Eso le valió para ser convocado por la selección boliviana dirigida por el ‘Bambino’ Héctor Veira, aunque recién hizo su aparición con casaquilla verde el 10 de noviembre de 1996 en La Paz en el empate 2-2 frente a Colombia.
Hacha que deshilacha
Con los de Odriozola jugó 21 partidos -todos como titular- y anotó dos goles bajo la conducción técnica del serbio Iván Brzic tanto en el torneo nacional como la Copa Conmebol. Debutó el sábado 1 de marzo de 1997 en el magro empate sin goles ante José Gálvez en el ‘Lolo’ Fernández por el torneo Apertura. Aquella vez, Ochoaizpur alineó en la zaga junto al ‘Cheta’ Domínguez, Álvaro Barco y Giuliano Portilla.
A la semana siguiente, Ochoaizpur recibió su primera amarilla en la victoria 0-2 de la ‘U’ sobre Unión Minas, pero lo más resaltante fue que esa vez actuó en el mediocampo junto a José Pereda, el ‘Puma’ Carranza y Eddy Carazas. La vehemencia de su juego como volante destructor generó que se ganara la mayoría de las veces una tarjeta -por lo que recibió el apelativo de ‘Hacha’-, siendo su saldo total de cartulinas acumuladas uno de 16, con 13 amarillas y tres rojas. Su última expulsión fue el miércoles 29 de octubre en la derrota de 4-0 en Belo Horizonte ante el Atlético Mineiro por la Copa Conmebol debido a doble amonestación. De paso, ese fue el cotejo con el que culminó su estadía con divisa crema, ya que la directiva de entonces decidió separarlo del equipo y, pese a un intento del plantel por evitar la medida, el mismo jugador decidió marcharse del club.
Sin embargo, el último partido que integró en forma activa en el torneo local fue el domingo 19 de octubre en Cusco contra Cienciano, cuyo score resultó favorable al conjunto imperial gracias al recordado autogol de José Carranza. En ese match, Ochoaizpur fue cambiado por Marko Ciurlizza. De otro lado, los goles que marcó en el Perú fueron dos: ante Torino en Talara el domingo 11 de mayo y ante Melgar el miércoles 8 de octubre en el estadio de la UNSA por el Clausura. Ambos resultados terminaron en igualdad: 1-1 y 2-2 respectivamente.
Te vi y no me acuerdo
A pesar de que en la ‘U’ no dio la talla como se esperaba, a Ochoaizpur le fue regularmente bien con Bolivia; inclusive anotó el gol que a la postre sirvió para ganar a Argentina -su país de origen- en las Eliminatorias por 2-1 en el mes de abril, en aquel partido escandaloso en el que Julio Cruz fingió un corte en el rostro. Empero, ello no determinó su permanencia y salió por la puerta falsa. Recaló al año siguiente nuevamente en el Bolívar y luego emigró al fútbol mexicano, primero con San Luis de Potosí y después con los Pumas de la UNAM hasta inicios de la nueva década, en la que llegó como titular pero las lesiones lo marginaron del primer equipo.
En 2003 fichó por el Técnico Universitario de Ambato de Ecuador y antes de finalizar su carrera como jugador regresó a Argentina para vestir las sedas del San Martín de San Juan, Sarmiento de su natal Junín e Independiente de Chivilcoy, con el que se retiró definitivamente en 2007.
Al colgar los botines, el ex volante siguió ligado al fútbol como entrenador. En 2008, los hinchas del San José de Oruro propusieron que fuera el técnico para afrontar con dignidad la Copa Libertadores, situación que finalmente no se cristalizó.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Foto: historiadelfutbolboliviano.com; Recortes: revistas El Gráfico y Once
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Uno de ellos fue Ramiro Blakut(no se si el apellido esta bien escrito)puntero derecho,flaquito,habilidoso que jugo en el Melgar.
Me parece que en esa misma epoca hubo un defensa ,de la seleccion boliviana en el mismo Melgar.
Saludos
Javier L
Esta es la verdadera causa, lo demas es cuento, siempre fue un jugador que defendio a sus compañeros sea el club que fuere.
Dicen que se peleo con el Gordo Alfredo Gonzalez, pero la verdad la dirigencia se canso de sus expulsiones, tarjetas amarillas y patadas mal intencionadas... El tipo era un salvaje..